Hoy no era un dia cualquiera,era un gran dia por lo menos para nosotros,los no privilegiados.Mi padre ese dia no acudió al taller de artesanía donde trabajaba porque todo el pueblo estaban preparándose para hacer una gran barricada: carros,madera,contenedores,objetos que pudiesen quemar todo por un mejor futuro(reclamar lo que era nuestro)esa es la frase que repetia todo el pueblo aquella mañana. Llegamos enfrente del palacio del rey, yo agarrada de la mano de mi madre con el miedo metido en el cuerpo observaba con los ojos bien abiertos com mi padre y los demás habitantes que eran campesinos o artesanos(no privilegiados) lanzaban objetos al palacio. Derrepente apareció el ejercito enviado por el rey que se acercaba rápidamente hacia nosotros con la intención de pararnos aunque su esfuerzo no sirvió de nada, no pudo el ejercito conseguir parar la revolución,que había comenzado por parte del pueblo para defender "LO QUE ERA NUESTRO" a los priviligiados.
